La superficie debe estar limpia, libre de calamina, polvo, grasas y sales.
Lijar las superficies lisas y eliminar las partículas sueltas de óxido y pintura con un cepillo metálico.
En caso de acero galvanizado nuevo, se recomienda dejar que la superficie pierda su brillo, por exposición al exterior y lijar la superficie con papel de lija grueso o un cepillo de alambre para eliminar los tratamientos de fábrica, hasta tener una superficie mate.
Eliminar el residuo generado por el lijado hasta tener una superficie limpia y seca. Si se necesita un líquido para quitar el residuo, no utilizar disolvente sintético, utilizar un detergente alcalino, por ejemplo, una solución de amoniaco.
32000062
6 Artículos

8 otros productos en la misma categoría: